jueves, 31 de mayo de 2007

el peligro de reciclar las pilas

Las pilas son una cómoda fuente de energía productora de electricidad a partir de reacciones químicas. De ellas se alimenta hoy buena parte de la aparatología que usa el hombre moderno. Todas son llamadas genéricamente pilas, pero sus nombres son variados y derivan de la composición interna. Pueden ser alcalinas, carbón-zinc, níquel-cadmio, botón según tengan mercurio, litio y óxido de plata, zinc-aire. Aunque la pila es práctica, no es energéticamente eficiente, ya que para su fabricación consume 50 veces más de la energía que esta produce.

Cuando la industria electrónica logró niveles de miniaturización casi inimaginables en sus diseños, con la consiguiente facilidad para la fabricación de aparatos portátiles, se produjo una gran explosión de producción seguida de un gran consumo. Nos encontramos hoy en el mundo, que no ha escapado a esta corriente, con el uso creciente de pilas, sin haber desarrollado métodos adecuados para la eliminación o reciclado de estos elementos.

El problema con las pilas es que cuando son depositados en los vertederos pueden perder su hermeticidad y liberar materiales como el plomo y el mercurio, seguidos por el bario, cadmio, cobre, níquel, zinc, estaño, vanadio y manganeso. Los elementos pesados son tóxicos en concentraciones bajas y además no son degradados, por lo cual tienden a bioacumularse, contaminando tierra, agua y medio ambiente en general, convirtiéndola en un residuo especialmente peligroso.

Por ejemplo, un micrópilo de mercurio puede contaminar 600.000 litros de agua al liberar sus componentes de mercurio o cadmio, el cual al entrar en contacto con la tierra y posteriormente cuando percolan y llegan a la napa de agua, contaminan la cadena alimentaria. Si tomamos en cuenta que sólo en Estados Unidos se eliminan 200 millones de pilas por año, nos daremos cuenta que el tema es más que preocupante.

Es conveniente el uso de aparatos conectados a la red eléctrica y preferir las pilas recargables, si bien son más caras y contienen cadmio, su durabilidad las hace menos peligrosas. Otra alternativa es optar por las pilas alcalinas con mínimo de mercurio y preferentemente opciones de las que se puede hacer uso. También es recomendable usar calculadoras o aparatos a energía solar y no dejar las pilas al alcance de los niños. Pueden llevarlas a la boca y hacer una inconsciente ingesta de metales pesados con su consiguiente peligro para la salud.

Aunque reciclar pilas es técnicamente factible, la recuperación de material de pilas usadas es un proceso complejo y su reciclaje no se realiza actualmente en Chile. De hecho, el tratamiento que se les suele dar a las pilas usadas que se recolectan consiste en encapsularlas en bloques de concreto con el fin de evitar que su contenido se derrame y contamine el medio ambiente.

1 comentario:

Anónimo dijo...

bueno yo soy una alumna de una institucion en l ake estamos tratando el tema de la kontaminacion y la verdad ke me parecio muy diferente e inportante tratar el tema de las pilas y me parecio ke este sitio es el adecuado para mi trabajo asi ke lo recomendare